Proporcionar a las mascotas con vitaminas, minerales y otros componentes nutricionales es importante para su salud y el bienestar, y la mejor manera de hacerlo es alimentarlos con una dieta equilibrada, completa y de alta calidad. Complementar la comida para perros a menudo altera ese equilibrio y puede causar problemas de salud.
Las personas complementan la dieta de su perro por diferentes razones:
Es importante saber que un alimento para perros de calidad está cuidadosamente formulado para satisfacer las necesidades calóricas del animal. El alimento proporciona aminoácidos esenciales, aceites de pescado que son ricos en vitaminas y minerales específicos para los requerimientos nutricionales del perro.
Los alimentos de calidad son por si solos completos y balanceados para una etapa específica de la vida o estilo de vida. Agregar sobras de la mesa u otros suplementos puede alterar el delicado equilibrio de nutrientes.
La interacción entre los minerales es muy compleja. Afortunadamente, esta área de la nutrición ha sido objeto de numerosas investigaciones durante muchos años. Estas investigaciones han demostrado que no solo son importantes los niveles individuales de minerales en una dieta, sino también el equilibrio adecuado. Un exceso de un mineral puede afectar la absorción de un segundo y provocar una deficiencia de ese segundo mineral.
Una forma común de suplementar es alimentar con carne extra. Sin embargo, debido a que la carne contiene de 20 a 40 veces más fósforo que calcio, agregar carne a una dieta balanceada alterará la proporción de calcio a fósforo (o Ca:P), que es importante para el desarrollo y mantenimiento adecuado de los huesos.
Esto podría hacer que el cuerpo de tu mascota absorba el calcio de los huesos para alcanzar el equilibrio adecuado. Este suele ser el caso en animales mayores que experimentan pérdida de dientes debido a la reabsorción del hueso de la mandíbula inferior. La relación Ca:P debe oscilar entre 1,1 y 1,4 partes de calcio por cada parte de fósforo.
Las cantidades excesivas de calcio se han asociado con varias enfermedades óseas que afectan a los cachorros en crecimiento. Los propietarios de cachorros de razas grandes, en particular, creen que sus cachorros necesitan calcio adicional para el desarrollo adecuado de los huesos grandes. Agregar yogurt, requesón o tabletas de calcio a la dieta del cachorro solo alterará el delicado equilibrio mineral del cuerpo.
Recuerda: Los cachorros de razas grandes consumen más alimento y obtienen el calcio que su organismo necesita comiendo las porciones recomendadas. La mejor manera de mantener una tasa de crecimiento normal es alimentar a los perros en crecimiento con una dieta balanceada utilizando un régimen de porciones controladas.
La Asociación Estadounidense de Funcionarios de Control de Alimentos (AAFCO) regula la industria de alimentos para mascotas y ha establecido ciertos requisitos nutricionales para perros. Estos requisitos se publican anualmente en el Manual de la AAFCO. Solo los alimentos para mascotas que han cumplido con los estrictos criterios establecidos por AAFCO pueden llevar la declaración 'completo y balanceado' en la etiqueta.
Cambiar a su perro a un nuevo alimento requiere algo de planificación. Debido a que los perros son criaturas de hábitos, tienden a preferir su alimento actual sobre un alimento nuevo. Al igual que nosotros, se acostumbran a un alimento y es posible que no les entusiasme una nueva rutina. Estos útiles consejos de alimentación para perros te ayudarán a mantener a tu perro satisfecho.
Cuando ayude a su perro a cambiar la dieta, piense 'lento pero constante'. Comience mezclando un 25 % de comida nueva con un 75 % de comida actual. Cambie lentamente las proporciones durante los próximos tres días aumentando gradualmente el alimento nuevo y disminuyendo la cantidad del alimento actual. Aquí hay un ejemplo de horario de alimentación:
Al final de este proceso, deberías darle el 100 % del alimento nuevo. Es posible que su perro quiera comer solo la comida anterior o no comer nada. No te preocupes, un perro saludable puede saltarse comidas por un día o dos sin ningún efecto nocivo.
Al traer un nuevo alimento a tu casa, ponerlo en el plato de tu perro y obligarlo a que debe comerlo puede hacer que tu perro se ponga en huelga de hambre. Este no es el momento de mostrar quién manda. Es mejor presentarle la comida nueva usando un tono de voz agradable y animándolo amablemente a probar la comida nueva.
¡La persistencia es la clave! Durante los dos primeros días de la transición alimentaria, no le des golosinas ni sobras de la mesa. Los perros nos entrenan tanto como nosotros los entrenamos a ellos. Ceder a sus demandas solo refuerza el comportamiento de rechazo y hace que sea más difícil hacer un cambio dietético nutritivo.
Cambiar de dieta puede ser más desafiante cuando se cambia de un alimento húmedo a un alimento seco. Si su perro continúa resistiéndose a comer comida seca, puede mezclarla con un poco de agua tibia. Incluso puede poner la comida humedecida en el microondas durante unos segundos. Si mezcla la comida con agua, asegúrese de desechar la porción no consumida después de 20 minutos para evitar que se eche a perder. La misma regla se aplica a los alimentos enlatados y en bolsa. Una vez que el perro se haya acostumbrado a la comida humedecida, puedes cambiarlo a comida completamente seca. Para hacer esto, siga las mismas instrucciones de mezcla descritas anteriormente.

