Cuidar a tu nuevo cachorro puede ser abrumador, pero con estos consejos y mucho amor, serás un gran padre cachorro en muy poco tiempo.
Al igual que un bebé, el cuerpo de un cachorro es frágil. Evite cargar a su cachorro a menos que sea absolutamente necesario. Si es necesario, tenga cuidado y siga estos pasos:
Paso 1: Coloque una mano debajo de la grupa de su cachorro y coloque la otra mano debajo de su pecho.
Paso 2: Levantar con ambos brazos. Con un perro adulto pequeño, usa la técnica del cachorro. Para perros más grandes, envuelva ambos brazos alrededor de sus piernas, acérquelo a su pecho y levántelo.
Antes de llevar a su cachorro a casa, asegúrese de tener los siguientes suministros:
Mantener a su cachorro seguro en su jardín requiere una buena cerca. Hay varias opciones para elegir, y la que debe elegir dependerá de la personalidad de su cachorro, su propiedad y su presupuesto. Estas son algunas de las opciones que debe considerar:
El momento ideal para traer a casa un nuevo cachorro es cuando la casa está tranquila. Desaliente a los amigos para que no pasen por allí y no permita invitados que pasen la noche. Primero, establece una rutina diaria y sigue estos pasos:
Paso 1: antes de traerlo a la casa, llévalo al área designada para ir al baño en tu jardín y pasa unos minutos allí. Si va, alabadle. Asegúrate de llevarlo a este lugar cada vez que haga sus necesidades.
Paso 2: Llévalo a la habitación con su caja. Esta área restringida le servirá como su nueva 'guarida' durante varios días. Coloque ropa de cama y juguetes para masticar en la jaula, deje la puerta abierta y cubra el área exterior de la jaula con papel periódico en caso de accidente. Que investigue la caja y la habitación. Si mastica u orina en su ropa de cama, retírela permanentemente de la jaula.
Paso 3: observe e interactúe con su cachorro mientras se acostumbra a su nueva guarida. Esto ayudará a forjar un sentido de 'manada' y te establecerá como el líder de la manada.
No trate a un cachorro tan joven como de 6 a 12 semanas como a un perro adulto. Trátelo de la misma manera que lo haría con un bebé, con paciencia, supervisión constante y un toque suave. La forma en que interactúas con tu cachorro a esta edad es fundamental para su socialización. Utilice estos consejos:
Lo ideal es que tus hijos te ayuden a elegir a tu cachorro. Cuando lo traigas a casa, no dejes que jueguen con él constantemente. Los cachorros necesitan mucho descanso, al igual que un niño en crecimiento. Limite las sesiones de juego de cachorros a períodos de 15 a 30 minutos, dos o tres veces al día.
Reunión con mascotas residentes
El humano no es el único afectado por las alergias. Al igual que usted, su perro adulto puede sufrir reacciones alérgicas a muchas cosas: en el aire, en la piel y en la comida. Las alergias deben ser diagnosticadas y tratadas por su veterinario, pero primero debe saber qué buscar.
Los síntomas de alergia más comunes en los perros son las reacciones cutáneas, independientemente de la causa. Y pueden, pueden surgir a cualquier edad. El hecho de que no haya tenido alergias cuando era cachorro no significa que su perro no las tendrá ahora que es adulto. Las alergias a los inhalantes, a los alimentos, al contacto y a las pulgas son cuatro de los tipos más comunes de alergias que pueden afectar a su perro.
Las alergias a los inhalantes en los perros son causadas por los mismos alérgenos comunes que te afectan a ti: polvo, hierba, árboles, moho, polen, ambrosía, etc. Pueden ser estacionales o persistentes y, aunque algunas razas (especialmente las razas de hocico corto) pueden experimentar los mismos síntomas de estornudos, las reacciones en la piel son las más comunes. Las alergias a los inhalantes a menudo se pueden tratar con los mismos medicamentos que usted toma, pero no trate las alergias de su perro sin supervisión veterinaria.
Las alergias alimentarias pueden ser las más difíciles de diagnosticar y controlar. El tratamiento implica un enfoque impredecible que implica una dieta restringida y la reintroducción gradual de posibles alérgenos para determinar al culpable. Las reacciones cutáneas a las alergias alimentarias son comunes en los perros, pero los vómitos o la diarrea frecuentes también pueden ser un signo. Tenga en cuenta que si hay un cambio en la dieta de su perro (o simplemente comió algo que no debía), podría experimentar un episodio de vómitos o diarrea, pero esto no significa necesariamente que su perro tenga alergia. Observe y vea si se convierte en un problema persistente antes de programar un costoso viaje al veterinario.
Las alergias por contacto a las pulgas generalmente causan irritación de la piel y se tratan por vía tópica. Es posible que se sorprenda al saber que a la mayoría de los perros solo les molestan vagamente las pulgas. Pero aquellos que son alérgicos pueden sufrir, al igual que sus dueños. Los perros con contacto y alergias a las pulgas a menudo muerden su piel en carne viva, lo que provoca pérdida de cabello, mal olor e infecciones, por lo que es imprescindible un control meticuloso de las pulgas.
Las alergias pueden variar dependiendo del perro, por lo que es importante que trabaje con su veterinario para asegurarse de que su perro reciba el mejor tratamiento posible. Ambos estarán más felices por ello.