La pulpa de remolacha es el material que queda después de que se extrae el azúcar de la remolacha azucarera, no de la remolacha roja. La pulpa de remolacha es una fuente de fibra en las dietas para perros.
La fibra se puede clasificar en no fermentable y fermentable. La fibra no fermentable permanece sin digerir a medida que pasa por los intestinos, lo que proporciona volumen para eliminar los desechos. La celulosa es una fibra no fermentable.
La fibra fermentable se descompone en los intestinos en ácidos grasos de cadena corta que proporcionan energía a las células que recubren el intestino.
La fibra moderadamente fermentable hace ambas cosas: proporciona volumen para mover los desechos y proporciona energía para las células que recubren el intestino. La pulpa de remolacha es una fibra moderadamente fermentable.
'La pulpa de remolacha es dañina'.
La pulpa de remolacha no contiene toxinas y es una fuente de fibra muy segura.
'La pulpa de remolacha afecta el color del pelaje'.
No hay nada en la pulpa de remolacha que pueda afectar el pigmento del pelaje. El interior es de color claro. La piel exterior, que es oscura, no se utiliza.
''La pulpa de remolacha contiene azúcar'.'
Por definición, la pulpa de remolacha es el material que queda después de quitar el azúcar de la remolacha azucarera. Por lo tanto, la pulpa de remolacha no contiene azúcar.
'La pulpa de remolacha causa hinchazón'.
La hinchazón (dilatación gástrica-vólvulo o GDV) está relacionada con un defecto estomacal que retrasa el vaciado. Se cree que la hinchazón no está relacionada con la dieta o los ingredientes, como la pulpa de remolacha. Sin embargo, la causa de la hinchazón sigue siendo desconocida.
Cambiar a su perro a un nuevo alimento requiere algo de planificación. Debido a que los perros son criaturas de hábitos, tienden a preferir su alimento actual sobre un alimento nuevo. Al igual que nosotros, se acostumbran a un alimento y es posible que no les entusiasme una nueva rutina. Estos útiles consejos de alimentación para perros te ayudarán a mantener a tu perro satisfecho.
Cuando ayude a su perro a cambiar la dieta, piense 'lento pero constante'. Comience mezclando un 25 % de comida nueva con un 75 % de comida actual. Cambie lentamente las proporciones durante los próximos tres días aumentando gradualmente el alimento nuevo y disminuyendo la cantidad del alimento actual. Aquí hay un ejemplo de horario de alimentación:
Al final de este proceso, deberías darle el 100 % del alimento nuevo. Es posible que su perro quiera comer solo la comida anterior o no comer nada. No te preocupes, un perro saludable puede saltarse comidas por un día o dos sin ningún efecto nocivo.
Al traer un nuevo alimento a tu casa, ponerlo en el plato de tu perro y obligarlo a que debe comerlo puede hacer que tu perro se ponga en huelga de hambre. Este no es el momento de mostrar quién manda. Es mejor presentarle la comida nueva usando un tono de voz agradable y animándolo amablemente a probar la comida nueva.
¡La persistencia es la clave! Durante los dos primeros días de la transición alimentaria, no le des golosinas ni sobras de la mesa. Los perros nos entrenan tanto como nosotros los entrenamos a ellos. Ceder a sus demandas solo refuerza el comportamiento de rechazo y hace que sea más difícil hacer un cambio dietético nutritivo.
Cambiar de dieta puede ser más desafiante cuando se cambia de un alimento húmedo a un alimento seco. Si su perro continúa resistiéndose a comer comida seca, puede mezclarla con un poco de agua tibia. Incluso puede poner la comida humedecida en el microondas durante unos segundos. Si mezcla la comida con agua, asegúrese de desechar la porción no consumida después de 20 minutos para evitar que se eche a perder. La misma regla se aplica a los alimentos enlatados y en bolsa. Una vez que el perro se haya acostumbrado a la comida humedecida, puedes cambiarlo a comida completamente seca. Para hacer esto, siga las mismas instrucciones de mezcla descritas anteriormente.

